La Ruta 13 nos orienta por el Valle de Siarb, agrupando la mayor parte de los pueblos del Municipio de Soriguera.
Visitaremos primero Embonui y Vilamur (R 13 -I-), continuaremos hasta Port Cantó, desde allí hablaremos de Freixa (despoblado), visitaremos seguidamente Rubió y el jardín de rocas, para acabar con guía, recorriendo el despoblado medieval de Santa Creu de Llagunes (R 13 -II-). Antes del almuerzo visitaremos Llagunes, para iniciar la tarde paseando por Soriguera y Puiforniu, y hablaremos del despoblado de Llavaners (Ruta 13 -III-). Finalizaremos la ruta visitando Tornafort, Malmercat, Saverneda y el santuario de la Mare de Déu del Soler (R.13-IV-).
Municipio de Soriguera
En la actualidad el municipio está integrado por los pueblos del valle de Siarb: Malmercat, Tornafort, Puigfornise, Embonui, Vilamur (capital), Soriguera, Llagunes, Rubió, Freixe y los caseríos de Savarneda y Llavaners. A los que se le añadieron Arcalis, Baro, Escós, Mencui y Estac.
Está claro que difícilmente los podamos visitar todos en un día, por ello en esta ruta visitaremos tan solo los pueblos del valle de Siarb.
El municipio se caracteriza por su extraordinaria y abrupta belleza natural, sus pequeños núcleos dispersos y su riqueza natural y patrimonial.
Todos los pueblos del valle tienen una clara etimología latina, no se han encontrado vestigios de posibles aldeas iberovascas antes de la llegada carolingia, lo que sí se cree es que Vilamur en su origen fue una villa mora.
Quiero recordar que según algunos historiadores la invasión sarracena estuvo controlada por los pueblos del Alto Pirineo, quizás en un inicio sin banderas ni creencias precisas, pero igual que en Asturias. frenando la expansión islámica y dando refugio a la cristiandad visigoda-romana.
Por otra parte no eran tierras buenas para la agricultura, principal fuente de riqueza entonces del mundo árabe y probablemente el objetivo de ser un tranquilo paso fronterizo quedó limitado por los pueblos del Valle de Arán, del norte aragonés y los valles altos del Pallars Sobirà. Se sabe que los sarracenos ocuparon Gerri de la Sal y que posiblemente llegaron hasta Sort pero poco más y su ocupación fue corta, en siglo IX ya estaba liberado todo el Pallars Sobirà de su presencia.
Hubiera o no una fuerza cristiana organizada anterior, se le otorgó a la Marca Hispánica Carolingia ser sus liberadores, así figura que a principios del siglo IX el conde Guillermo I de Tolosa conquistó los territorios del Pallars y Ribagorça al islam, incorporándolos al condado de Tolosa.
A finales de ese mismo siglo los clanes señoriales locales se independizaron e instauraron la dinastía de los condes del Pallars (dividido en dos condados en el siglo XI), de los que dependería hasta el siglo XV el Vizcondado de Vilamur (del que hablamos al final del post). Durante un breve periodo anterior se llamó de Siarb, denominación que se conservaría como topónimo del valle.
Está documentada la defensa y protección del mercado de los vizcondes de Vilamur por parte de los condes de Pallars, instalado en la “Verneda“ de Sort y especialmente importante por la venta de sal de Gerri, del que hablaremos desde Malmercat.
Aunque no sé si hay una relación, pero señalo que los Consejos de los pueblos de herencia iberovasca, de los que hablamos en la Vall d’Àneu, LLessui, Vallferrera, etc., presentaron en el medievo una fuerza organizativa y reivindicativa de sus derechos comunales frente al señor feudal, incluso alguna vez llegarían a imponer sus reivindicaciones por la fuerza (Andorra, Vall de Cardós, etc).
Pero el Valle de Siarb parece que nunca llegó a tener ese nivel organizativo, incluso desde la edad moderna mantendrían un gobierno caciquista, utilizando las brujas continuarían manteniendo prácticas feudales hasta finales del siglo XVIII. Hablaremos de ello en Puiforniu, en la nota final del post Ruta 13 -III-.
El Valle de Siarb se incluye dentro del “Parc Natural de l’Alt Pirineu”. Una de las características geológicas del Valle es la tierra roja, las rocas están formadas por conglomerados de arcilla, gres y limo. En un clima semiárido de violentas erupciones, la disposición de gran parte de estos materiales se desarrolló sobre el nivel freático, oxidando el material férrico en forma de hematites (oligisto). Sus sedimentos se irían depositando en el llano fluvial para erguirse por los profundos plegamientos de la cordillera pirenaica.
En Rubió podremos visitar el jardín de rocas, ilustrándonos de la rica formación rocosa del Valle y del “Parc Natural de l’Alt Pirineu”.
Otra de las características del Valle es la escasez de servicios turísticos, tan solo en Vilamur encontraremos un lugar para comer. En la actualidad ha crecido la oferta de turismo rural, acompañando al antiguo Refugio en LLagunes, en Vilamur y Malmercat, siendo en Tornafort, convertida en la población del valle con el reclamo turístico más alto, en la que encontraréis varias ofertas de casas rurales.
Senderismo por el Valle de Siarb
El Valle tiene una larga tradición excursionista. EL catálogo de RUTASPIRINEOS reúne una amplia propuesta de los recorridos más populares, partiendo de diferentes puntos del valle.
En Llagunes encontraremos el Refugio del Vall de Siarb, un lugar ideal desde el que iniciar múltiples recorridos, os dejo aquí la amplia propuesta reunida por Wikiloc desde el Refugio.
En este pueblo se encuentra también el Museu de Camins, una entramado de corredores, senderos, caminos… por los que encontraremos construcciones, unas mantenidas aunque hayan perdido su antiguo uso y otras recuperadas por la comunidad en su memoria, convirtiendo el circuito en un museo al aire libre, un paseo por la historia de los usos, técnicas y costumbres que determinaron la vida rural en los últimos siglos en el Valle. También visitan el poblado medieval de Santes Creus, el museo de Llagunes, etc…
También por Tornafort pasa el “Ramats de Camins”, un conjunto de caminos siguiendo los pasos realizados en los años 50 por los escritores José Cela y Josep María Espinàs, reflejados en sendos libros.
En la primavera de 2017 se celebró por primera vez el Festival de Senderisme de la Vall de Siarb, en 2022 se realizó a finales de Mayo. Siento no tener noticias en 2023.
Iremos identificando otras propuestas senderistas desde las propias localidades.
Cruzando el puente de SORT en dirección oeste, iniciamos el ascenso hacia Vilamur. Dado que la ruta es circular, a unos 7 km y después de pasar por la única gasolinera que encontraremos en la valle de Siarb, no dejar de parar en el mirador, aunque en aquella mañana el cielo estaba nublado, se podía distinguir desde la Verneda de Sort hasta las cumbres de Collegats.
A poco más de 1Km encontraremos un desvío a la izquierda que nos orienta hacia Embonui.
EMBONUI
El pueblo está situado a 1117,2 m. de altitud en el extremo norte del término municipal de Soriguera, al sudeste de Sort y al noroeste de Vilamur.
Según Joan Coromines es un topónimo de origen celta, pero no da respuesta a su significado.
En el fogaje 1553 registra 2 fuegos civiles y uno eclesiástico, reuniendo 10 habitantes.
Tres siglos después, en tierras de baja calidad, flojas y pedregosas, se cultivaba maíz, centeno, patatas y heno. Se criaban ovejas, vacas, mulas y había buena caza de conejos y liebres.
Se desconoce el número de habitantes en el siglo XIX, dado que se contabilizaban junto con los residentes de Vilamur.
En 1920 convivían 21 habitantes y en 1940 lo hacían 28 almas, pero a partir de aquí iría decreciendo lentamente hasta alcanzar el mínimo en 2006 reuniendo 9 vecinos. Con un lento ascenso alcanzarán convivir 17 vecinos en 2022.
La Fiesta Mayor la celebran el primer fin de semana de septiembre.
El pueblo es extraño, dada la diferencia que calzan las fachadas de las pocas edificaciones, en el que los campos de cultivo y arreglados pajares mostraban cierta actividad agropecuaria, pero no descubrimos vida animal.
La aldea presenta dos edificaciones anteriores al siglo XX, un par levantados a principios del mismo y otro par levantados a principios del presente siglo, creando una mezcla curiosa muy poco homogénea, en algunos casos la uralita había suplantado la pizarra.
En el extremo sureste se pueden apreciar los lavaderos y amplios depósitos de agua, hoy todo abandonado. A su lado encontraremos la iglesia y unas vistas preciosas.
Ermita de Santa Eugènia
Es una pequeña capilla rectangular con la cabecera hacia levante y la puerta hacia poniente. La mampostería es de piedra pizarrosa, pequeña e irregular. La puerta es de arco de medio punto rodeado en su origen por finas y pulidas dovelas, hoy se esconden tras un amplio y sobresaliente marco blanco con esgrafiados.
Por encima se abre un óculo cuadrado y culmina sobre el piñón del tejado a dos aguas una pequeña espadaña de un solo ojo luciendo en la estrechez una campana.
También parece bastante moderna la disposición de losas de cerámica, ¿gres?, sobresaliendo en los ángulos de los bajantes, conservando con refuerzos la pizarra en el resto del tejado.
Después de disfrutar de las hermosas vistas, volvimos a descender hacia el coche.
Nos dirigimos nuevamente motorizados por la N-260hacia Vilamur, capital histórica y actual del amplio municipio de Soriguera, cuatro kilómetros nos separan.
VILAMUR
El pueblo de Vilamur está situado a 1257 m. de altitud sobre un amplio y alto llano, encuentro del “Serrat de Castejón” por poniente y de la “Querrilla” por el suroeste. Al norte se encuentra el extremo de poniente del Serrat de Sant Miquel.
Domina gran parte del valle de Siarb y la amplia Verneda de Sort. Según parece a principios del siglo IX eran árabes los que habían ocupado o creado la población de Vilamur, pero no se han encontrado vestigios de aquel tiempo.
Tan solo algunos presentan como testimonio de esta ocupación la principal y más antigua fuente al lado de la Iglesia: La Font del Moro, y que la patrona del pueblo sea la Virgen de Medina.
Medina significa en árabe ciudad iluminada. Sería la Virgen más venerada por la comunidad mozárabe en la península.
Oficialmente no sería hasta el siglo XV que se diversificarían las denominaciones Marianas, por lo que parece hace mención la de Vilamur al lugar.
A finales del siglo IX los clanes aristocráticos locales se independizaron del dominio de los condes de Tolosa e instauraron las dinastía de los condes del Pallars. Creándose el feudatario vizcondado de Vilamur, siendo la ciudad homónima la capital. Lo continuaría siendo del término municipal de Soriguera, antes y después de la incorporación del municipio de Estac.
El castillo de Vilamur aparece documentado por primera vez en 1070 por la cesión de la mitad del mismo por parte de Ramon Guifré a su hermano Mir Guifré.
El escudo de Vilamur muestra una muralla de plata sobre un fondo rojo, no sé si indicando la característica de su tierra roja.
En el fogaje de 1553, Vilamur reúne 41 fuegos laicos y 1 eclesiástico, agrupando 210 habitantes.
Tres siglos después serían 256 vecinos. Por lo que se ve, su crecimiento sería muy poco.
Disponían de tierras de baja calidad, pedregosas y flojas, en las que cultivaban centeno, patatas, judías y heno. Se criaba ganado de todo tipo, aunque a partir del siglo XVIII hasta hoy prevalecerá el vacuno. Había buena caza de liebres, perdices, conejos y truchas.
El descenso de población comenzaría a partir del último tercio del siglo XIX. En 1888 eran 215 habitantes y en 1900 convivían 153 vecinos. Aumentan ligeramente durante las primeras décadas del siglo XX, alcanzando en 1930 los 178 habitantes, pero a partir de aquí el descenso sería continuo, así en 1970 eran 73 almas y en 1991 alcanzarán el mínimo con 41 habitantes. En el 2000 eran 56 vecinos, a partir de entonces el crecimiento ha sido muy lento pero continuo, en 2011 se registran 60 censados y en 2023 se reúnen 91 habitantes.
Fiestas y festejos
La Fiesta Mayor se celebra el 14 y 15 agosto.
Hasta el primer tercio del siglo XX se conservaría el “Ball de la Cadril”. Un recuperado baile medieval, en el que participaban doce parejas avanzando en hilera, en un momento del baile los hombres daban una palmada en las piernas de la acompañante y ésta le devolvía una puntada de pie. Se dice que la danza proviene de Francia (Occitània) y está dedicada a la vendimia.
No sé si ahora se le permitirá exhibirse, la polémica está servida: tradición o machismo.
Desde hace un par de años confluye los tres días anteriores a la fiesta Mayor el Festival Terra Roía.
Es un festival artístico que reúne una treintena de artistas de diferentes especialidades, con la especial presencia de las artes plásticas. Se exponen en calles, eras, cubiertos, garajes, la iglesia, en “lo taller” y alguna casa del pueblo.
También destaca parejo el pequeño festival de música “Roi music fest”.
Desde el pico del Orri (2500 msnm), en 2022 se realizó un espectáculo nocturno de música y luz. Port Ainé dispuso los telesillas para acceder al evento en directo. Se podía seguir desde la pantalla del espacio de audiovisuales, situado en el Silo de Vilamur.
![]() |
Senderismo desde Vilamur
Alrededor del 6 de Mayo se celebra el Skyrace Pic de l’Orri, promovido por el ayuntamiento de Soliguera, es una carrera que transcurre por caminos cercados por robles, pinos, encinas y prados para el pasto, hasta alcanzar la cumbre del Pic de l’Orri.
Desde Vilamur hay varias cortas excursiones familiares muy interesantes, tanto hacia los encantadores bosques del Tossal de Sant Joan de VIlamur, hacia Tornafort o hacia el este alcanzando Llagunes, todos pisando los antiguos caminos que los unían.
Os dejo una propuesta circular de Wikiloc de Vilamur a LLagunes, un precioso paseo de dificultad técnica fácil, siete Kilómetros que podréis recorrer en un par de horas.
Por Vilamur pasan la mayoría de circuitos circulares por el Valle de Siarb, de la que ya antes os dejamos su referencia.
Servicios turísticos
El bar Pic de l’Orri el único servicio de restauración en todo el Valle de Siarb en el que podremos almorzar. Por lo que sería nuestro destino, reservado para las 14:30.
Es un pequeño bar con tapas, bocadillos y platos combinados, cuenta con una pequeña terraza. Tiene una valoración muy variada con una media de 7,8. Por las tardes, vecinos de Vilamur y de pueblos colindantes se reúnen aquí para jugar a la tradicional butifarra (juego de cartas).
La Valoración media es de 7,6 (Google).
Casa rural tortalmente espada para un máximo de 10 personas, cuenta con tres habitaciones, 4 camas dobles y dos individuales. 1 cuarto de baño.
No dispongo de valoraciones.
El trazado Medieval de Vilamur
El pueblo conserva su trazado medieval que, de forma poco habitual, se organiza en un rectángulo alargado de oriente a occidente con un buen delineado interior.
La primera muralla se determina anterior al siglo XII y se desarrolla en un cuadrante central. Entre el siglo XIII y XIV se amplía por los laterales, formando la iglesia parte de la muralla.
![]() |
Desarrollo de Vilamur. Wikipedia. |
Está dividido por tres calles transversales y tres horizontales, un singular trazado medieval rodeado por vestigios de la antigua muralla junto a construcciones relativamente modernas. Delante del gran parking se pueden ver las casas, hoy con ventanas y puertas, pero que en su día formaban parte de la muralla.
Conserva aún el testimonio de las tres puertas de acceso al interior del núcleo urbano. La puerta noreste de la muralla está unida a la iglesia, en la década de los 70 se transformó y amplió para que pudiera entrar el camión de la leche.
En el lateral norte de la iglesia podréis observar que no hay ninguna entrada de luz, mostrando en la primera planta una sillería bien cortada, grande y bien alineada, mientras que en una segunda planta la mampostería es pequeña y tosca pero también bien alineada, la misma que debía dar continuidad a la muralla por encima del arco.
También la edificación de la plaza, hoy parte sede de las dependencias municipales, es de manufactura moderna, respetando la esencia del pueblo: piedra roja y pizarra.
Antes de internarnos por la villa, nos entretuvimos unos minutos alrededor del templo.
Mare de Déu de Medina
Declarada Bien cultural de interés local.
La primera mención del templo se tiene en la dotación canónica de Santa Maria de “La Seo d’Urgell” en el año 1010, nombrada como Santa Maria del valle de Siarb.
La iglesia parroquial fue la sede de un priorato de la Orden Hospitalaria dependiente de la encomienda de Susterris.
En 1251 la iglesia de Vilamur figura perteneciente a la orden de San Juan de Jerusalén, según consta documentado el pago del prior de Sant Pere de les Maleses a Ramon de Liri, comendador de Vilamur. En 1400 figura prior de Vilamur el honorable Ramon Cerqueda.
Las encomiendas medievales se fundaron a principios del siglo XII, siendo la Orden Hospitalaria la primera. Dada la necesidad de administrar los gastos e ingresos de diferentes donaciones y herencias, establecieron casas en las que se reclutaba y adiestraba a sus miembros y controlaban los bienes y recaudación de su entorno. Se organizaron de una forma semejante a las religiosas: abadías y prioratos.
En 1575, en la visita pastoral, continúa perteneciendo a la Orden. En el año 1662 unos comisarios hospitalarios documentan que el diezmo de Vilamur se dividía entre el prior de dicha localidad y el duque de Cardona.
El templo actual de Vilamur es un amplio edificio de una sola nave, con una estructura compleja que expresa un proceso de reformas difíciles de precisar. La iglesia depende de Sant Feliu de Sort.
El templo románico es de finales del siglo XII, formaba parte del antiguo recinto amurallado de piedra roja. En su origen presentaba una planta compuesta por una nave rectangular cubierta con bóveda de cañón y un ábside semicircular techado por una bóveda de cuarto de esfera. Posiblemente contaría con un transepto con dos capillas en los muros laterales cubiertas con bóvedas de cañón.
La sillería de los muros de la iglesia, con un alto grado de perfección, muestra un románico tardío con grandes reformas en el siglo XIV, con la reconstrucción y ampliación de la nave y la substitución de la cubierta original de bóveda de cañón por un envigado sostenido por arcos de diafragma.
También en el muro sur, paralela a la milenaria fuente del moro, se pueden apreciar tapiadas una ventana de doble derrame de medio punto y otra de derrame simple que exteriormente adquiere forma de saetera.
Más tarde sería alterado el muro con la apertura de ventanas cuadradas y el sobrealzado del lienzo septentrional, en el que vuelve a destacar la tosquedad del aparejo utilizado.
Se modificó la puerta de entrada, situada en su origen en el muro sur de la nave y hoy tapiada. Era una bella puerta con arco apuntado con tres arquivoltas asentadas sobre impostas.
Se puede apreciar los motivos zoomórficos que decoraban la arquivolta central plana, que aunque el desgaste es manifiesto, aún se pueden identificar bien las figuras en la arquivolta central en su lado derecho.
Orientada hacia el este se sitúa el ábside semicircular, que junto con el muro del sur son los únicos restos románicos que quedan en pie. El paramento exterior es liso, con sillería bien labrada y dispuesta de forma uniforme, pero en el lado norte, se mezclan con mampostería más pequeña y escasamente tallada, propias de una reforma chapucera posterior.
En el siglo XVII, el interior fue objeto de otra profunda reforma, adaptada a la decoración barroca característica de ese momento.
La puerta actual con arco de medio punto se sitúa en la fachada de poniente, se construyó entre el siglo XVII/XVIII. Por encima se abre un deteriorado óculo.
El campanario se elevó en el siglo XVIII, es de planta cuadrangular, transformado en octogonal por desgaste curvo de las aristas, con una alargada ventana con arco de medio punto dovelada a cada lado, nos extrañó no observar ninguna campana.
Corona el campanario revestido de pizarra un capitel octogonal irregular con baja inflexión en la base, luciendo ésta un amplio alero.
En 1985, se reformó la cubierta barroca, colocándose en su lugar una cubierta de madera de una sola pendiente revestida de losas de pizarra.
También se saneó el campanario y se reforzaron los sillares de las ventanas.
Todas estas reformas han comportado que la iglesia presente hoy la estructura barroca encajonada dentro del edificio románico preexistente.
Te incorporas al templo por un pequeño vestíbulo por debajo del coro. El suelo es de losas de piedra y está dos escalones por debajo de la actual plaza.
La triple cubierta permite observar el arranque de la bóveda de cañón románica por encima de las capillas laterales y los arcos diafragmáticos góticos.
![]() |
Vilamur. Plano del ICGC. |
Dejamos el templo para internarnos por el pueblo. De la plaza mayor surge la calle Mayor hacia a oeste, toda alineada a su derecha por edificaciones porticadas. Según parece hasta principios del siglo XX, bajo las arcadas se situaron comercios y talleres.
Aunque la mayor parte del los fundamentos de las casas son anteriores al siglo XX, unas serían restauradas en el primer tercio del siglo XX y otra gran parte en el último tercio, todas guardan la esencia constructiva de su piedra roja y tejados de pizarra.
Al finalizar la calle Mayor, haciendo esquina, después de pasar por un amplio y rehabilitado pajar, está la casa Franquet, según leí contaba con la capilla de la “Mare de Déu del Roser”, actualmente convertida en lavadero.
Tengo que decir que la fotografía en la wikipedia señala la capilla al lado de la fuerte del Moro, pero en otros lugares la sitúa acompañando un lavadero a pocos metros frente a la casa, tampoco descubrí por el lugar ninguna referencia arquitectónica a una ermita.
Recorrimos la parte occidental, en el extremo noroeste encontraremos el cementerio, me lo supuse en su momento fuera de murallas pero pegada a ella.
Unos metros por abajo se encuentran los restos de la puerta oeste del pueblo amurallado, al fondo se vislumbra la postal de Tornafort.
Continuamos hacia el sur regresando al “carrer Únic”.
Al internarnos por la calle “del mitg”, encontraremos “Lo Taller”, residencia-estudio de Albert Aznar, un artista que desde hace años reside en Vilamur, manteniendo una exposición permanente de su obra, compartida con el también artista plástico Jesús F. García. Es el principal promotor del Festival Terra Roía.
A unos setecientos metros por la N-260 dirección a Port de Cantó y a la izquierda, encontraréis un camino de tierra (sin señalizar) que en 300 m. os conduce a un complejo defensivo de búnqueres, trincheras y pozos de tirador. Serían construidos una vez ocupada la vertiente derecha del Noguera por las tropas nacionales, con el objetivo de asegurar sus posiciones desde las cimas más estratégicas, tal es el caso del “tossal de Sant Joan de Vilamur”.
Es manifiesta la situación estratégica, pero también un balcón desde el que podemos disfrutar de la belleza paisajística que lo rodea.
Fortificaciones de la guerra civil
La caída del frente de Aragón supuso la llegada del ejército franquista el 13 de abril de 1938, ocupando los pueblos de Gerri de la Sal, Peramea, Enviny y Son.
El Cuerpo de Ejército de Navarra fue la gran unidad franquista que custodió el
frente del Pallars, estuvo compuesto por unos 25-30.000 hombres y dividida en tres divisiones: la 61, 62 y 63.
En este frente destacan los combates en mayo del 38 especialmente cruentos en Sant Corneli y en las Peñas de Aoló, menos intensos en el Mont de Conques, Baladredo y Serelles. En esta ofensiva los republicanos pretendían recuperar el control de las centrales hidroeléctricas y cortar la carretera del Valle de Arán, pero no lo lograron (hablamos más extensamente de ello en la Ruta 11-ll-).
Su relativa proximidad a la carretera y a las principales poblaciones de la comarca, permitió a las tropas franquista avituallarse con facilidad, relevo de unidades y la evacuación rápida de los heridos, ventajas que no dispuso el ejército republicano.
Una vez consolidada la ocupación militar en El Pallars, se efectuó la distribución de los sectores militares. El de Sort fue comandado por el general Antonio Sagardía Ramos (de funesta memoria por el asesinato de civiles de forma indiscriminada) que estableció su cuartel de mando en el chalet Emiliana y desplegaría las acciones militares de la 62 División.
El conjunto militar de Vilamur, uno de los mejores conservados de los Pirineos, se comenzaría a fortificar en abril de 1938, pero las construcciones serían ocupadas a finales de septiembre del mismo año, por ello se dispuso de chimeneas en los búnkeres, no sería fácil aguantar aquí las bajas temperaturas.
El conjunto dispuso de 9 búnkeres enlazados por una red de trincheras. Serían construidos a base de piedras unidas con mortero o bien mediante encofrados a partir de estructuras de madera. La cubierta era de hormigón sobre troncos.
Las unidades que cubrieron este centro de resistencia contaron entre 550 y 700 hombres.
La verdad es que poco o ningún desgaste mantuvo el complejo. Bien pasada la guerra serían los habitantes de la zona que utilizaron las piedras, vigas de madera, hierro, etc.
También sería utilizado en el contrabando de Andorra, por lo que algunos de los nidos de ametralladoras fueron incendiados por la Guardia Civil.
Continuando sobre el asfalto dirección a Port de Cantó, volveremos a ver hacia al sur la imagen icónica que nos irá acompañando desde diferentes puntos del valle:Tornafort.
* * * *
El medieval Vizcondado de Vilamur
Ya hablamos del origen del vizcondado, siendo en 1015 cuando aparece el primer conde oficialmente documentado: Ató, al servicio entonces de los condes del Pallars Jussà. Se llegarán a nombrar un total de 28 vizcondes y 2 vizcondesas, la última de ellas, Juana II, sería en 1572.
Después de Ató, con dominios en Enviny, Cardós, Morreres, Vilamur y “Llacunes”, lo sucedería su hijo Bernat I, pero serían sus nietos los que emprenderían importantes campañas de conquista de territorios ocupados por el islam, así Gilbert asediaría y conquistaría el castillo de Tendrui (Pallars Jussá) en 1066.
Su hermano Arnau recibiría del conde Ramón VI del Pallars Jussà el castillo de Talarn y por parte del conde Arnau II del Pallars Sobirà el castillo de “Sant Just”.
Sus hijos continuarían las batallas fronterizas expandiendo las tierras cristianas. Pere I sería el titular (por muerte prematura de sus hermanos mayores), lucharía por Ramón I conde del Pallars en Mur en 1098, Tremp en 1099, Àreu el 1110, Tendrui hacia 1112 y Galliner en 1117. A la vez instauraría el nombre de Pere a la saga del vizcondado. En una donación de la Villa de Crescent (hoy desparecida) al canónica de Urgell, aparece por primera vez con el título de Vizconde de Siarb.
En 1126 lo sucede su hijo Pere II o Pere Arnau I, nombrándose oficialmente vizconde de Vilamur, aunque no sería documentado hasta 1149. A partir de aquí se mantendría la denominación hasta la desaparición de los señoríos. Lo sucedería en 1164 su hijo Pere III.
No voy a exponer todos los casamientos y cargos eclesiásticos que dispusieron estas familias, tan sólo tenéis que ver los apellidos nutrido de familias nobles del Pallars Jussà, Pallars del Sobirà y Alt Urgell, para descubrir el gran poder y extensión que alcanzó el vizcondado tan sólo en su red familiar.
![]() |
Cuadro Genealógico vizcondes del Vilamur. Enciclopèdia Catalana. |
Pere IV sería posiblemente el vizconde que llegaría a controlar mayor territorio dado el acuerdo matrimonial de su hija con el hijo del conde Roger I del Pallars Sobirà en 1250, recibiendo los castillos de Montcortés, Peramea, Estac, Enviny, Castellgermà y Espluga de la Serra.
Cuatro años después adquiriría Santa Engràcia, Salàs de Pallars, Riverd, Puiforniu, Llavorsí, Torre la Ribera, Escaló y Segura (en el camino del Port de la Bonaigua). En 1213 vendió el castillo de Sarroca al monasterio de Gerri de la Sal.
Ramón I, aliado con los condes del Pallars, Foix y Urgell contra el rey, sería derrotado y preso en Balaguer junto al conde en 1280. Para su liberación cedería al rey, junto con el de Vilamur, los castillos de Naens, Sant Just, Cadolla, Betesa, Casterner, Tornafort, Montenartró, Embonui, Santa Creu, Burg y Rubió.
En 1283, el vizconde Ramon I volvió a la obediencia del rey y le prometió ayuda contra el monarca francés. Por su colaboración sería nombrado en 1297 veguer de Pallars y Ribagorça. Devolviéndole gran parte de los castillos entregados.
Dejó un hijo bastardo: Bord y un hijo legítimo Pere V, el vizconde no parece figurar mucho en la historia, incluso su hermano bastardo tendría mayor protagonismo. Pere VI conquistaría Juneda en 1338.
En 1340 Pere VII heredaría el vizcondado, recupera Juneda y Pobla de Segur en 1358, participaría en las campañas del Rosellón y Mallorca (1343-44) contra el infante Ferran de Castilla en 1352 y en la campaña de Cerdeña en 1353, concediéndole la realeza Basturs, Pui y Pobla de Segur.
En 1370 lo sucede su hijo Pere IX, llamado Pericó, bajo la tutela de su madre “Sibil.la d’Anglesola”, señora de Vilamur y Montenartró. La muerte de Pericó en 1381 le otorga el vizcondado a Ramon d'Anglesola, señor de Bellpuig y II de Vilamur por herencia de Sibil·la. Cinco años más tarde moriría sin descendencia, heredando Hug II de Cardona el vizcondado.
A partir de aquí seguiría los destinos de esta casa, que en poco menos de un siglo sería la protagonista de la derrota del último condado soberano, pasando el Pallars por orden Real a formar parte del Marquesado de los Cardona, la que más tarde sería la Casa de los duques de Medinaceli y que duraría hasta la abolición de los señoríos en el siglo XIX.
Evidentemente el poder de la familia también sería religioso. Ocuparían la sede episcopal de Urgell: Bertran de Vilamur (1188-1194), Bernat de Vilamur (1199-1203) y Ponç de Vilamur (1230-1257), la de Girona: Bernat de Vilamur (1292-1312) y Guillem de Vilamur (1312-1318) y la de Lleida : Ponç de Vilamur (1321-1324).
Uno de los más tristemente conocidos fue Ponç de Vilamur (s. XIII ). Su padre fue el vizconde Pedro IV de Vilamur y sus tíos eran Bernat de Vilamur, obispo de Urgel, y Berenguer de Erill, Obispo de Lérida. Por lo que no le faltaron padrinos para escalar, llegando en 1230 a ser obispo de Urgell.
Siendo ya Obispo patrocinó las pinturas de Santa Catalina en la Catedral de Santa María de la Seo d’Urgell.
Recuerdo que esta santa (de dudosa existencia) sería utilizada, siendo la patrona de la orden de los dominicos (con la inquisición en sus manos), en la lucha y genocidio del catarismo. El Obispo sería un cruel y radical combatiente de la considerada “herejía”.
Durante su obispado se enfrentó a Roger IV de Foix, hasta que el Vizcondado de Castellbó se independizó del condado de Urgell. Sus deshonrosas actuaciones le reportaron graves acusaciones de crímenes y vicios, llegando a Roma las denuncias en 1248. Las investigaciones de Raimundo Peñafort encargadas por el Papa harían que perdiese el cargo.
* * * *
No hay comentarios:
Publicar un comentario